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No se puede ver, tocar ni oler, pero en una escuela o universidad todos se dan cuenta inmediatamente cuando no está. Ahora, el WiFi, para un alumno, es tan importante como una pluma o un lápiz.

Para un profesor, es imperativo tener acceso a infinitos recursos en línea que optimizan el aprendizaje, eliminando la presión del profesor de saberlo literalmente todo.

A un administrador de una institución educativa, le permite gestionar con eficiencia y seguridad el tráfico en las instalaciones, que a veces incluyen mil o más personas, incluyendo personal, estudiantes y los invitados.

La educación evoluciona a gran velocidad para un aprendizaje a través de experiencias emocionantes, envolventes y guiadas por los profesores. Esta realidad está más cerca de lo que gracias al nuevo espectro de 6 GHz al que acceden las redes basadas en Wi-Fi 6E.

Entonces, ¿cómo encaja el Wi-Fi 6E en la educación del futuro? En primer lugar, empecemos por lo que es Wi-Fi 6E. El aspecto más importante de esta nueva versión de Wi-Fi es que añade 1,200 MHz adicionales, desde los 5.925 GHZ hasta los 7.125 GHZ.
Esto amplía el espectro disponible para Wi-Fi entre dos y cuatro veces el espectro actual disponible (los resultados difieren según el país). Esto representa, la mayor expansión de la capacidad de Wi-Fi en sus 23 años de historia y significa que hay mucho más espacio disponible para que Wi-Fi soporte conexiones fiables y sin congestiones.

Hay otras mejoras en Wi-Fi 6 y 6E, como la reducción de la latencia del tráfico, la asignación de canales más pequeños a diferentes dispositivos para un acceso multiusuario en el mismo tiempo, cobertura de hasta el doble con relación a WiFi 5, modulaciones más complejas y canales más amplios para una velocidad de transmisión aumentada.

Este tipo de optimizaciones son muy relevantes para la educación, donde las altas densidades de estudiantes y dispositivos requieren conectividad en las aulas, los auditorios, las bibliotecas, los dormitorios, los recintos deportivos y otros lugares para aplicaciones críticas. Algunos ejemplos son:

Pruebas y evaluaciones en línea, que son de gran importancia para las escuelas y universidades. Cuando se llevan a cabo, la red Wi-Fi debe funcionar sin problemas y no puede ser la razón por la que un examen no pueda calificarse rápidamente.

Aplicaciones de colaboración de vídeo como Zoom, Meet y Teams que apoyan el aprendizaje remoto e híbrido. Aunque estas aplicaciones pueden crear problemas de capacidad en algunas redes escolares, la clave es garantizar un servicio fiable, ya que estas aplicaciones son sensibles a los parámetros de calidad de la red, como la latencia, las fluctuaciones, la velocidad de transmisión y la estabilidad en el enlace inalámbrico.

Las aplicaciones de gran ancho de banda, como la realidad aumentada/realidad virtual (AR/VR), cuyo uso aumentará con el tiempo y que planteará requisitos aún más estrictos a las redes inalámbricas.

Mientras que los requisitos para este tipo de aplicaciones habrían sido imposibles en las redes inalámbricas hace años, los avances en la tecnología Wi-Fi de las últimas generaciones han permitido casos de uso totalmente nuevos.

Wi-Fi 6E sienta las bases para mejorar la calidad de las redes inalámbricas y permitir este tipo de aplicaciones ahora y en el futuro. Aunque muchos de estos retos y nuevos requisitos no afecten directamente a los centros educativos en la actualidad, es inevitable que lo hagan en algún momento.

Para las decisiones de compra que se tomen, ¿debería considerarse el Wi-Fi 6E dadas las ventajas que aporta? Algunos puntos a tener en cuenta:

Vida útil de la red-La vida media de una red Wi-Fi es de unos cinco años. No cabe duda de que el uso de Wi-Fi 6E será mucho más generalizado dura…